A esa conclusión llegó un acercamiento al tema del periódico The Washington Post en el que colaboraron estudiantes de periodismo de los estados de Arizona, Georgia, Maryland, Carolina del Norte, Texas, Indiana y esta capital, con el objetivo de ayudar a recabar las opiniones en todo el país.
Según el reporte, los educandos de la enseñanza superior se han enfrentado este otoño a una nueva y caótica realidad en el campus: un panorama legal que cambia rápidamente y unas normas totalmente nuevas tras la decisión del Supremo.
Para los pro-vida, los cambios son buenos, pero para otros son aterradores, ya que obligarían, especialmente a las muchachas, a plantearse situaciones impensables hace tan solo unos meses, como tener que abandonar los estudios de quedar embarazadas, expresaron en sus respuestas.
«Sinceramente, siento que no puedo tomarme un respiro. Graduarme en el instituto en 2020 en medio de una pandemia y tratar de superar la mayoría de edad dentro de ella ya fue bastante difícil”, afirmó Helena Woroniecka, de 24 años, de la Universidad de Arizona.
Ahora, tener que preocuparme –dijo- de que me quiten mi autonomía corporal y la de millones de personas me hace sentir triste y temerosa por el nuevo año escolar.
Mientras Sara De Rosa, de 19 años, del Chandler-Gilbert Community College, también de Arizona, consideró que con la derogación de la sentencia de Roe vs. Wade (que desde 1973 brindó protección legal al aborto) retrocedieron 50 años.
En las elecciones de medio término del pasado 8 de noviembre, los votantes de estado de Michigan consagraron el derecho al aborto en la constitución estatal como también lo hicieron California, Vermont, Kentucky, Carolina del Norte y Pensilvania.
El pronunciamiento a través del sufragio ocurrió cinco meses después de la anulación del histórico fallo por el máximo tribunal de la nación, de mayoría conservadora.
Los defensores del derecho de la mujer a decidir sobre sus cuerpos advirtieron que de no frenar ese impulso antiaborto en el futuro, se podrían afectar otras libertades civiles.
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