El segundo acuerdo parcial alcanzado el 26 de noviembre en México entre el Gobierno bolivariano y una porción de las oposiciones, representada en la Plataforma Unitaria, impactó de manera positiva en la mayoría de la sociedad venezolana, que acogió con beneplácito lo allí ocurrido.
La percepción de la ciudadanía no solo muestra su regocijo por el beneficio económico de este convenio, que redundará en recibir mejores servicios de salud, educación y electricidad, sino también por el retorno de la deseada paz, tras oscuros años de continua violencia.
El pacto logrado en México fue un buen paso de diálogo y entendimiento para recuperar los recursos congelados y secuestrados en el exterior, calculados de 24 mil millones a 30 mil millones de dólares, dijo el presidente Nicolás Maduro en rueda de prensa el miércoles.
Maduro consideró que el impacto del diálogo para el clima del país es muy positivo, porque “hemos conquistado la paz en estos años”, nos costó conquistar y establecer la paz, hay que ver por lo que hemos pasado, expresó.
Recordó sucesos como las guarimbas (revueltas) de 120 días en el 2017; el sabotaje al proceso electoral y el intento de asesinarlo en el 2018; de imponer con disturbios y violencia un gobierno paralelo en el 2019; de invasión a Venezuela en medio de la pandemia y todo lo pasado en el 2021.
Pero logramos la paz y el impacto directo de las conversaciones es que consolida el clima de paz y recuperación del país, remarcó.
En su cuenta en Twitter, el gobernante aseguró que la rúbrica entre el Gobierno venezolano y ese sector de la oposición, constituye un punto de partida para avanzar hacia la «paz absoluta» con la atención integral del pueblo.
Significó que también es una demostración que actuar en el marco de la Constitución para buscar la paz, en la diversidad de la oposición, para dialogar con todos esos sectores, es el camino correcto.
Nosotros debemos mantenernos en los caminos del diálogo, del entendimiento, de la paz y de la recuperación de Venezuela, recalcó.
En ese sentido, el jefe de Estado sostuvo la víspera una reunión con la opositora Alianza Democrática, en la continuación de su estrategia política de dialogar con todas las oposiciones.
En el Salón Boyacá, en el Palacio de Miraflores, sede de Gobierno, el jefe de Estado recibió a Juan Carlos Alvarado, secretario general de Copei; Luis Augusto Romero, de Avanzada Progresista; Bernabé Gutiérrez, secretario general de Acción Democrática, y Timoteo Zambrano, de Cambiemos.
También asistieron Luis Parra, presidente del Movimiento Primero Venezuela; y José Brito, coordinador nacional del Movimiento Primero Venezuela.
Vamos a dialogar porque queremos unas elecciones libres, libres de sanciones y de medidas coercitivas unilaterales, que las quiten todas, se las lleven para ir a unas elecciones frescas, bonitas, buenas, en el momento que la Constitución determine y el Consejo Nacional Electoral como órgano rector, indicó.
No menos importante, por su impacto político y económico, esta semana, en el actual contexto, el Gobierno bolivariano firmó contratos con la empresa estadounidense Chevron, que dan continuidad a las operaciones y la producción petrolera de esa compañía en el país.
ro/jcd