El paquete incluye municiones para sistemas de cohetes de artillería de alta movilidad (Himars), 80 mil proyectiles de artillería de 155 milímetros, equipos de sistemas aéreos no tripulados, defensas antiaéreas, vehículos de ruedas multipropósito de alta movilidad, ambulancias, equipo médico y 150 generadores, acorde con la fuente.
Según la información, la ayuda en material bélico proviene de la autoridad de retiro presidencial, o sea, el ejército estadounidense extraerá armas de sus propias reservas para enviarlas a Kiev.
Esta autorización es la vigésima séptima retirada de equipos de los inventarios del Departamento de Defensa para Ucrania por parte de la administración de Joe Biden desde agosto de 2021.
Washington ha comprometido alrededor de 19 mil 300 millones de dólares en armamento desde el comienzo del conflicto con Rusia en febrero, y alrededor de 20 mil millones desde que el actual gobernante ocupara la Casa Blanca, abundó el comunicado.
Añadió que, desde 2014, el monto asciende a 22 mil 100 millones de dólares.
Los continuos envíos de armas por parte de Estados Unidos, además de alargar el conflicto entre Rusia y Ucrania, desconocen los constantes llamados de diversos sectores en pos de encontrar una salida negociada que ponga fin a la conflagración.
Un ejemplo elocuente de esto fue protagonizado en octubre pasado por un grupo de congresistas demócratas, que instaron al Ejecutivo a buscar una solución por medio de conversaciones entre las partes involucradas.
Por su parte, el Quincy Institute for Responsible Statecraft añadió que la facilitación de armamento a Ucrania, sin una estrategia diplomática para poner fin al conflicto con Rusia, corre el riesgo de alargar el diferendo, acrecentar el sufrimiento humanitario, o incluso escalar a una confrontación directa entre Washington y Moscú. lam/ifs