Equipos de limpieza iniciaron sus tareas en varios distritos de esta capital en la que residen 15 millones de personas, la inmensa mayoría de ellos en chozas precarias construidas a toda prisa cerca de elevaciones en las cuales ocurrieron delizamientos de tierra, según los reportes de medios oficiales y de prensa.
El caso más significativo es el de los residentes cerca del puente Makele donde decenas de personas tratan de salvar sus precarias posesiones mientras lloran la pérdida de sus deudos.
Además de los torrenciales aguaceros la endeblez del sistema de alcantarillado fue incapaz de evacuar el volumen de agua liberado por la laguna Makelele, desbordada por varios días de lluvia inclemente y constante.
La combinación mezcla de superpoblación y pobre infraestructura resultó letal para esta ciudad, ubicada en la ribera del río Congo, el noveno más largo del mundo, con sus cuatro mil 700 kilómetros de longitud hasta que desagua en el océano Atlántico, el segundo más extenso del planeta.
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