Funcionarios del Buró Federal de Investigaciones (FBI) y del Departamento de Justicia advirtieron un aumento de 10 veces en las tramas de la también conocida como sextorsión en el primer semestre de 2022, en comparación con el mismo período del año pasado.
Las autoridades recibieron miles de denuncias en ese periodo e indicaron que la mayoría de los casos eran de varones y provocaron el suicidio de más de una docena.
Según reportes de medios de prensa, las maniobras estaban originadas mayormente fuera de Estados Unidos, especialmente en Nigeria y Costa de Marfil, y las víctimas tenían mayormente de 14 a 17 años, aunque también fueron entrevistados niños de solo una década de vida.
El canal CNN precisó que en las redes sociales, por medio de sitios de chat y de juegos en línea, los depredadores usualmente comienzan a comunicarse con sus objetivos antes de pasar la conversación a otra plataforma en la que usan principalmente mensajes directos.
Los sujetos engañan a las personas para que les proporcionen fotos explícitas y, tras recibirlas, les exigen dinero, a veces miles de dólares, con la amenaza de que entregarían las imágenes a sus familiares y amigos.
Otros medios noticiosos indicaron que los niños y adolescentes son contactados por personas que usaban falsos nombres femeninos.
“La vergüenza, el miedo y la confusión que sienten las víctimas cuando se ven atrapadas en ese círculo les impide a menudo pedir ayuda o denunciar los abusos”, dijo el FBI.
El director de esa agencia, Christopher Wray, señaló en un comunicado que hubo un “aumento horrible en los informes de esquemas de sextorsión financiera dirigidos a menores de edad”, y muchos de quienes lo sufren “ni siquiera están incluidos entre los números oficiales”.
De igual forma, instó a los padres y cuidadores a actuar para prevenir este crimen.
En febrero pasado hubo conmoción aquí por la muerte del estudiante de 17 años Ryan Last, quien recibió un mensaje de alguien que creía era una mujer y entabló una conversación en la que le envió una foto íntima.
De inmediato, el ciberdelincuente amenazó con hacer pública la imagen y exigió cinco mil dólares; en cuestión de horas, el adolescente se suicidó.
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