Bruni precisó que la ceremonia comenzará a las 09:30 hora local del próximo jueves, presidida por el papa Francisco y, cumpliendo con los deseos expresados por Benedicto, “se realizará en la mayor sencillez”.
La oficina de celebraciones litúrgicas, dirigida actualnete por monseñor Diego Ravelli, se prepara desde hace algún tiempo para este evento, que reúne particularidades diferentes a los realizados hasta ahora, pues nunca antes un Sumo Pontífice había presidido el funeral de su inmediato predecesor.
Se trata de la primera vez en que la muerte de un papa no marca el inicio de la Sede Vacante, período que va desde el final de un pontificado hasta el comienzo del siguiente con la elección del nuevo pontífice en la Capilla Sixtina.
Las liturgias fúnebres comenzarán con la exposición del cuerpo de Joseph Ratzinger en la Basílica Vaticana, a partir de la mañana del 2 de enero de 2023, un ritual que será dirigido por Ravelli.
Todas las oraciones han sido modificadas, pues no se rezará por un pontífice que murió reinando, sino por el obispo emérito de Roma, un papa que hace algún tiempo dejó de gobernar y, según las fuentes vaticanas, por tal razón no se prevé el denominado novendiali, nueve días de luto papal que comienzan tradicionalmente con el funeral.
Su entierro se realizará en las Grutas del Vaticano, conjunto de tumbas papales situado debajo de la Basílica de San Pedro.
El papa emérito Benedicto XVI falleció este sábado en el monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano, a las 09:34 hora local, como consecuencia del agravamiento de su estado de salud, debido a su edad avanzada
El 28 de diciembre último el papa Francisco pidió ese día una oración especial por Benedicto, y señaló que en los rezos debemos recordarlo, “pidiendo al Señor que lo consuele, y lo sostenga en este testimonio de amor a la Iglesia, hasta el final”,tras lo cual lo visitó en el monasterio Mater Ecclesiae.
Bruni aclaró posteriormente que “de momento, la situación sigue bajo control, vigilada constantemente por los médicos” y de hecho el pasado viernes comunicó que “anoche el papa emérito pudo descansar bien”, pero posteriormente su estado de salud empeoró.
El portavoz del Vaticano precisó que Benedicto recibió la Unción de los Enfermos el pasado miércoles, al final de una misa efectuada en el el Monasterio Mater Ecclesiae, donde residía desde su renuncia, en febrero de 2013.
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