Según precisaron los órganos especiales, el contenido del escondite de armas y municiones estaba preparado para usarse en actos subversivos y terroristas en la ciudad de Lugansk.
Los agentes del orden encontraron ametralladoras, lanzagranadas, cartuchos de diversos calibres, incluso de fabricación extranjera, y una munición para un cañón 2A28.
Además, las fuerzas de seguridad señalaron que los explosivos fueron detonados en el lugar del hallazgo.
Asimismo, las autoridades afirmaron que llevan a cabo medidas operativas y de investigación para identificar a las personas implicadas en actividades terroristas.
El pasado 31 de diciembre, los servicios especiales rusos encontraron otro escondite de saboteadores ucranianos en los suburbios de Lugansk, capital de la república homónima.
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