Según la Oficina de Seguros de Canadá ningún evento o región fue responsable de la mayoría de ese tipo de pérdidas, ya que durante el año anterior se produjeron catástrofes en casi todas las regiones del país.
Ello contrasta con el 2016, considerado el peor de la historia debido en gran parte a los incendios forestales ocurridos en la región de Fort McMurray, en la provincia de Alberta, que representaron cerca de tres cuartas partes de los daños a nivel nacional.
De acuerdo con el reporte, lo más costoso en Canadá en el calendario precedente fue el fenómeno conocido como el derecho, que avanza en línea recta, es extenso y de larga duración, el cual ocurrió el 21 de mayo en Ontario y Quebec, y causó daños por valor de mil millones de dólares.
A su paso, el derecho puede provocar vientos huracanados, tornados, fuertes lluvias e inundaciones repentinas.
Por su parte, Fiona provocó afectaciones calculadas en 800 millones de dólares, y las tormentas de verano en el oeste otros 300 millones.
El gobierno de Canadá se comprometió a proporcionar ayuda financiera para su reconstrucción a las provincias que sufrieron el embate de Fiona, huracán que se formó el 14 de septiembre del 2022 y cerca de 15 días después.
En 2021, los daños a los bienes asegurados atribuidos a los fenómenos meteorológicos graves alcanzaron aquí los dos mil 100 millones de dólares.
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