El Ministerio criticó el contenido del comunicado emitido por los representantes de estos cuatro países tras su reunión en Ginebra, Suiza, con el enviado especial del Secretario General de la ONU para Siria, Geir Pedersen.
Tal declaración es una repetición despreciable y un intento desesperado encaminado a justificar la violación de estos países a la soberanía de Siria y su injerencia en sus asuntos internos, fustigó un comunicado de la Cancillería.
Denunció que el texto de una manera paradójica no abordó la resolución 2253 del Consejo de Seguridad sobre la lucha antiterrorista ni la resolución número 2672, que estipula apoyar los proyectos de recuperación temprana.
Hacer caso omiso a tales resoluciones comprueba el continuo apoyo de estos gobiernos al terrorismo y su obstrucción de los esfuerzos para mejorar la situación humanitaria en Siria, especialmente en el sector de electricidad, aseveró el Ministerio.
Agregó que si estos países estuvieran realmente preocupados por la situación humanitaria en Siria, deberían levantar inmediatamente sus medidas coercitivas unilaterales inhumanas e inmorales contra el pueblo sirio.
Siria acusó a estos cuatro países de respaldar con armas y dinero a los grupos terroristas desde el estallido de la guerra en 2011, además de ofrecerle una cobertura política en los organismos internacionales.
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