El ministerio de Relaciones Exteriores denunció que Washington busca enlodar los intereses y derechos de las firmas nacionales con acusaciones infundadas, cuando su constante envío de armas a Kiev incide en la prolongación e intensificación de la crisis.
Según advirtió, Beijing no permitirá chantajes ni daños a las compañías chinas, como tampoco contribuirá a exacerbar el conflicto ruso-ucraniano ni sacará provecho del mismo.
La Cancillería ratificó la postura china a favor de la paz y una salida negociada, al exigir a la Casa Blanca dejar de suministrar equipos bélicos y crear las condiciones para llevar a Moscú y a Kiev a la mesa de diálogos.
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