El dato de enero dio continuidad a la bajada del 0,1 por ciento en diciembre y estuvo impulsado por la reducción de los costos de los productos energéticos, que llevó al menor aumento anual de la inflación importada desde finales de 2020.
No obstante, en términos interanuales, los precios de importación aumentaron un 0,8 por ciento, que supone la menor subida desde diciembre de 2020, tras el alza del 3,0 por ciento registrado en diciembre.
En un análisis por sectores, los precios de los combustibles importados cayeron un 4,9 por ciento tras bajar un 4,4 por ciento en diciembre; y específicamente los del petróleo cedieron un 4,5 por ciento. Mientras, el costo de los alimentos importados subió un 1,3 por ciento.
Sin embargo, los precios de importación subyacentes -que excluyen el combustible y los alimentos- se incrementaron un 0,2 por ciento, tras un crecimiento del 0,4 por ciento en diciembre.
Según analistas, las cifras de esta semana reflejan una aceleración mensual de los precios al consumidor y al productor en enero, lo que aviva el temor de los mercados financieros a que la Reserva Federal mantenga su campaña de subidas de tasas de interés.
Desde marzo, la autoridad financiera estadounidense subió sus tasas de interés en 450 puntos básicos, desde un nivel próximo a cero hasta un rango de entre 4,50 y 4,75 por ciento.
lam/att