El descanso por estas festividades es uno de los más largos del año y esta vez se extenderá desde mañana sábado hasta el martes 21 de febrero con una reducción del Impuesto al Valor Agregado (IVA) del 12 al 8 por ciento en hoteles y restaurantes.
Las autoridades prevén que más de un millón de personas se movilicen por las vías del país, lo cual contribuye al turismo y la reactivación económica.
En diversas localidades preparan espectáculos artísticos y actividades tradicionales de estas fechas en las que predominan los bailes, espuma, talco, pintura y recipientes llenos de agua arrojada a transeúntes o a quienes con alegría comparten esa costumbre.
La Secretaría de Cultura de Quito anunció recientemente la realización de un carnaval de luces y colores en el municipio capitalino, una festividad que coincide con la fiesta ancestral del Pawkar Raymi, término kichwa referido al florecimiento.
Justamente con ese concepto la ciudad de Ambato, a 150 kilómetros al sur de Quito, realizará del 17 al 21 de febrero su tradicional Fiesta de la Fruta y de las Flores, en la que predominan las comparsas culturales, carros alegóricos decorados con elementos naturales de la región.
Los ecuatorianos disfrutarán esas actividades como una pausa en medio de la crisis política existente en el país, donde muchos llaman a la renuncia del presidente Guillermo Lasso o a su juicio político por las recientes denuncias de vínculos con la corrupción y el narcotráfico.
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