Según el vicetitular de Exteriores, todos los tanques Leopard, que se envíen serán aplastados en los campos ucranianos por el fuego del ejército ruso, por lo que se puede catalogar como “absurda” esa decisión.
Riabkov agregó que el material blindado que Estados Unidos y sus aliados llevan a Ucrania testimonian que en la mente de los responsables en Washington no hay espacio para una solución política al conflicto.
«Hemos enviado señales de advertencia a los estadounidenses en varias líneas, que en general se reducen a no jugar con fuego, demostrando una apuesta por una escalada total y sin alternativas», añadió el diplomático.
El viceministro manifestó que otro «aspecto triste» de lo que ocurre es la trivialización del uso de las armas nucleares, pero subrayó que Rusia seguía comprometida con el postulado fundamental de que la guerra nuclear es inaceptable.
«Moscú sigue comprometido con el postulado básico de la inadmisibilidad de la guerra nuclear. No hay cambios en los documentos doctrinales, que también se han mencionado repetidamente, pero al mismo tiempo vemos que el curso de escalada de Occidente no tiene límites», concluyó Riabkov.
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