De acuerdo con Minette Batters, presidenta de esa organización que agrupa a más de 46 mil empresas agrícolas, los productores deben apagar sus invernaderos con calefacción, por tanto, los compradores enfrentarán, presumiblemente, estantes vacíos de verduras en tiendas y supermercados.
A su juicio, todo el mundo quiere evitar el racionamiento de manera efectiva, no obstante, “existirán desafíos en la disponibilidad de algunos alimentos” como: pimientos, papas, coliflor, brócoli de brotes morados y tomate.
Frente a esta realidad y el agotamiento de los suministros en los puntos de venta, varios supermercados introdujeron medidas como la imposición de un límite en la compra de dos o tres artículos en algunas frutas y verduras, entre ellas, pepinos, lechuga, bolsas de ensalada y frambuesas.
Sumado a las consecuencias de los altos precios de la energía, las inundaciones, bajas temperaturas y ferries cancelados ocasionan significativos problemas de abastecimiento en la región, situación que, eventualmente, acontecerá durante semanas.
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