“Recomendamos encarecidamente al Gobierno estadounidense que sea consciente de las consecuencias, según el Derecho Internacional, de albergar un pseudo medio de comunicación terrorista que promueve la violencia. Sin duda alguna, la República Islámica adoptará las medidas necesarias”, anunció el portavoz del Ministerio de Exteriores, Naser Kanani.
El diplomático persa lanzó la advertencia luego que la red de televisión Iran International informara la semana pasada que suspendería las operaciones en su sede principal en Londres y se trasladaría a su oficina más pequeña en Washington, DC.
Kanani denunció que esa cadena es patrocinada y dirigida por los servicios de inteligencia de varios países, incluido el Reino Unido y se desempeña como el “brazo operativo e incluso educativo” de los enemigos de Irán.
El medio de comunicación fue declarado por Teherán como organización terrorista, por instigar la violencia y dar espacios a los grupos terroristas y secesionistas.
“La reubicación de esa cadena de televisión del Reino Unido a Estados Unidos es un espectáculo de marionetas y un show, así como alguna división del trabajo entre los servicios de inteligencia de ciertos países”, insistió el vocero de la diplomacia persa.
Advirtió que el traslado del medio de Londres a Washington no reducirá la responsabilidad de los gobiernos que lo apoyan y albergan, especialmente el británico, en relación con sus actividades terroristas, separatistas y antiraníes, y remarcó que seguirán persiguiendo judicialmente a los patrocinadores esa entidad.
La cadena Iran International inició sus transmisiones en 2017 en Londres antes de abrir una segunda oficina en Washington el año pasado, este y otros medios de prensa de lengua farsi como BBC Persian y VOA Farsi, lanzaron una campaña de mentiras y desinformación sobre las manifestaciones ocurridas tras la muerte de la joven iraní Mahsa Amini a mediados de septiembre.
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