En una entrevista transmitida por Radio Sonorama, la presidenta del CNE, Diana Altamaint, divulgó que lo que se encontró fue un grupo de personas imprimiendo actas de recuento, que deben ser procesadas una vez que la junta electoral autoriza la apertura de las urnas porque hay inconsistencias.
El pasado 9 de febrero, Enrique Pita, consejero de esa institución electoral, anunció que habían encontrado un centro de cómputo paralelo en un segundo piso de la sede provincial en Guayaquil.
Por tal motivo, en esa provincia ecuatoriana el CNE terminó de contar todos los votos del proceso el 22 de febrero.
Con el fin del conteo de las actas en la provincia de Guayas, única que faltaba, terminó el proceso para oficializar los resultados definitivos de los sufragios realizados hace más de 15 días.
Más de 13 millones de ecuatorianos estuvieron llamados a las urnas para elegir prefectos, alcaldes, concejales urbanos y rurales, vocales de juntas parroquiales, los siete miembros del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (Cpccs) y respondieron también a las ocho preguntas del referendo.
Esos cuestionamientos propuestos por el Ejecutivo para reformar la Constitución recibieron el rechazo de la población y a su vez el progresismo —en particular el movimiento Revolución Ciudadana (RC)— ganó espacio en las principales provincias y municipios del país, como Quito y Guayaquil.
lam/nta