Anoche, el club andaluz sufrió para finalmente clasificar a la siguiente fase de la Europa League, pese a perder ante el conjunto neerlandés PSV Eindhoven 0-2, gracias al 3-0 conseguido en el partido de ida.
Un alivio dentro de la mala temporada del Sevilla en LaLiga, bajo las órdenes del argentino Jorge Sampaoli desde hace cuatro meses que de hecho, lo convierte en el plantel español que sigue en liza en este nivel, tras la desastrosa campaña del Barcelona.
Los catalanes de Xavi Hernández cayeron la víspera ante el Manchester United 2-1, con goles de los brasileños Fred y Anthony, y uno solitario de penal del polaco Robert Lewandowski en el cobro de un dudoso penal.
Cuatro veces eliminado de las competiciones europeas, dos en cada una de las principales, los azulgranas, no obstante, los refuerzos del pasado verano con la hipoteca de sus derechos de televisión y de marcas en el largo plazo, parecen divorciados de la senda del éxito en el continente.
Un contrasentido, hasta cierto punto, por contar con jugadores de la talla del polaco, los franceses Koundé y Dembelé, el uruguayo Araujo, el brasileño Raphinha, el alemán Ter Stegen y el talentoso español Pedri.
Sin embargo, vale decir que el Barcelona tiene encaminada la conquista del cetro en LaLiga, con ocho puntos de ventaja sobre el Real Madrid.
Sucede, en cualquier caso, que el eventual avance de los merengues en la Champions League se aprecia generalmente como un batacazo al Barça, mucho más cuando ha sido eliminado por dos años consecutivos de las disputas europeas.
Esta misma semana, el Real Madrid volvió a las llamadas Noches Mágicas de las remontadas, y en la casa del Liverpool inglés, revirtió a su favor el resultado 2-0 a un casi lapidario 5-2 que deberá confirmarse en el partido de vuelta, el 15 de marzo en el Santiago Bernabéu.
La batalla mediática, sin duda alguna, se concentrará ahora con mucho énfasis para el Barcelona en LaLiga y en la Copa del Rey, sus dos únicos títulos a conseguir en esta temporada.
Mientras, “la casa blanca” buscará asegura el pase a cuartos de final en la Champions contra el Liverpool, no alejarse más de la cima en la justa nacional, y batallar por la Copa del Rey.
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