La delegación está conformada por el jefe de la Unión Interparlamentaria Árabe, Muhammad al-Halbousi, y los presidentes de los senados de Iraq, Emiratos Árabes Unidos, Jordania, Palestina, Libia y Egipto, además de representantes de los parlamentos del Sultanato de Omán y Líbano.
El presidente sirio, Bashar al-Assad, recibió en el Palacio del Pueblo de esta capital a la delegación que decidió venir a Damasco tras la clausura de la 34 conferencia de la Unión de Parlamentos árabes, que sesionó en Bagdad, la capital iraquí.
Estamos en la querida Damasco para confirmar nuestra solidaridad a nuestros hermanos aquí y apoyarlos para que puedan superar esta adversidad, dijo el presidente de Consejo de Representantes Iraquí, Muhammad al-Halbousi, durante una sesión de bienvenida del Parlamento sirio.
Agregó que Siria es indispensable para los árabes y debe volver a su entorno árabe.
A su vez, el presidente del Consejo Nacional Palestino, Rawhi Fattouh, consideró que esta visita encarna el regreso de los árabes a Siria, que es el corazón palpitante del arabismo.
Vinimos para reiterar nuestra solidaridad y exigir que se levante el bloqueo impuesto a Siria, declaró el presidente de la Cámara de Representantes de Libia, Aguila Saleh.
La víspera, la Unión Interparlamentaria Árabe manifestó su solidaridad con Siria y su apoyo a Damasco para que recupere su importante rol árabe, como lo era antes de la guerra.
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