Un profesor universitario de Nueva Zelanda y dos pobladores locales fueron secuestrados la semana pasada en una zona remota y densamente boscosa del país.
«Nos tomó un tiempo pero los tres han sido devueltos exitosamente», declaró Marape en un comunicado.
La policía negoció con los secuestradores, quienen exigieron un millón de dólares, una suma enorme para uno de los países más pobres del Pacífico.
Marape también indicó que los rehenes fueron liberados tras una operación encubierta y que no se atendió la demanda inicial de dinero, aunque no brindó más detalles.
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