Un mes en el cual se rinde homenaje a la mujer, y con la consecución de sucesos políticos, sociales y culturales de relevancia, las roqueras alzan sus voces e instrumentos por la paz, la libertad, sus derechos civiles y otras demandas, conseguidas con la música.
Suele pensarse que cuando se aísla a las guitarristas, bajistas o vocalistas, ello sugiere falta de un verdadero talento, o por lo menos, distante al de los caballeros roqueros, pero las damas de este tributo, no son tan buenas como ellos, son mejores.
La estadounidense Janis Lyn Joplin (1943-1970), por ejemplo, fue una cantante de rock y blues convertida en un ícono hippie y de la contracultura en la década de los 60.
Considerada por la crítica especializada una de las mejores y más influyentes artistas de todos los tiempos y la primera mujer estrella del rock and roll, sus discos se encuentran actualmente entre los más vendidos de la industria musical.
Se incluyó en el lamentable y fatídico grupo denominado El club de los 27, famosos que fallecieron a esa edad, dominados unos por las sobredosis, otros quizás por episodios, como homicidios, o suicidios, en fin, sus arriesgados estilos de vida.
A esa lista pertenece también un gran músico estadounidense y amigo de Joplin -el deceso de ella ocurrió solo un par de semanas después que el de este legendario-, Jimi Hendrix, quien tenía la misma edad.
La joven roquera creó su banda Kozmic Blues Band, y tras un largo y fructífero período de giras internacionales que la llevaron a varios países de Europa, la tensión la hizo adicta a la heroína y culminaba cada concierto hablando de su vida privada.
Con su ímpetu y enérgica personalidad Joplin se convirtió en un símbolo de fuerza y de rebeldía para muchas mujeres de su época.
Otra roquera de vanguardia fue Carole King, autora de más de 100 sencillos exitosos, quien logró un notoriedad como artista de grabación (Tapestry, 1971), con el cual vendió más de 10 millones de copias.
Como solista atrajo a 60 mil fanáticos al Hyde Park de Londres para escuchar el mencionado álbum en vivo cuatro décadas después de su lanzamiento inicial.
Pianista, compositora y cantante, King resplandeció en los años 60, cuando tuvo su etapa de mayor actividad, mientras, en la faceta de intérprete sobresalió durante la siguiente década.
Es acreedora de cuatro premios Grammy y se encuentra incluida en el Salón de la Fama del Rock and Roll y en el Salón de la Fama de los Compositores por su trabajo, junto con su compañero Gerry Goffin, con quien escribió más de dos docenas de temas para numerosos artistas.
Durante ese período de triunfos muchas de esas personalidades se convirtieron en estándares.
La llamada poeta laureada del punk, letras nítidas y sin complejos Patti Smith, representa otra de las leyendas del rock, con sonido protopunk gutural, todo lo cual le proporcionó la plantilla a esta artista, no solo en la floreciente escena del mencionado género de los 70 en Nueva York, sino, para las legiones de bandas alternativas siguientes.
Su música inspiró, pero lo hizo con inteligencia, dejando una marca indeleble en el modelo roquero, sin embargo, su activismo actual representa un compromiso y una carta de presentación ante ciertas apatías y poca voluntad política.
Smith critica en sus canciones, sobre todo en las de la última década, las injusticias contra niños, jóvenes y mujeres, y la violación de derechos humanos.
Mantiene su actividad en estos momentos con giras y conciertos contra la guerra.
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