Según comunicó el funcionario a la agencia de noticias Sputnik, como consecuencia del trabajo de las baterías de defensa, restos de los aviones no tripulados cayeron sobre algunas viviendas y un residente resultó herido.
A su vez, el asesor del jefe de la República de Crimea, Oleg Kriuchkov, informó en su canal de Telegram que todos los drones apuntaron a las instalaciones civiles, uno de ellos fue derribado sobre un colegio técnico y los restantes, sobre barrios residenciales.
Kriuchkov agregó que cada uno de los drones derribados contenían explosivos y metralla.
Desde que Rusia lanzó su operación militar en Ucrania en febrero de 2022, varias regiones fronterizas, entre ellas Belgorod, Kursk, así como la península de Crimea, reportaron daños materiales y víctimas civiles por impactos de proyectiles y drones lanzados desde el territorio ucraniano.
Una decena de los aeropuertos en el sur de la parte europea de Rusia permanecen cerrados.
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