¿Cuántos estadounidenses más deben morir para que los republicanos del Congreso actúen para proteger a nuestras comunidades?, preguntó el mandatario, según un comunicado de prensa de la Casa Blanca.
Ya es hora de que exijamos el almacenamiento seguro de las armas de fuego, dijo y pidió cumplir con comprobaciones de antecedentes para todas las ventas de tales artefactos, así como eliminar la inmunidad de responsabilidad de los fabricantes de armas.
“Podemos y debemos hacer estas cosas ahora”, subrayó el gobernante demócrata, quien ya dijo que la violencia armada es la epidemia que corroe al país.
Una gran mayoría de estadounidenses quiere que los legisladores actúen con reformas de sentido común en materia de seguridad de las armas, apuntó.
Sin embargo, desde Florida a Carolina del Norte y en la Cámara de Representantes de Estados Unidos “hemos visto a funcionarios republicanos redoblar la apuesta por proyectos de ley peligrosos que hacen que nuestras escuelas, lugares de culto y comunidades sean menos seguros”, añadió.
Es inconcebible, es imprudente, y demasiados estadounidenses lo están pagando con sus vidas, admitió Biden.
La policía de Lousville identificó este lunes a Connor Sturgeon, de 23 años, como autor del ataque armado al Old National Bank, donde perdieron la vida cuatro personas y otras nueve resultaron heridas, tres de ellas reportadas en estado crítico.
El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, ordenó que todas las banderas estén a media asta en honor a las víctimas del tiroteo, el más reciente de una cadena de 146 en lo que va del 2022, de acuerdo con el rastreador en línea Gun Violence Archive (Archivo de la Violencia Armada).
El suceso se produjo apenas dos semanas después de la masacre provocada por otro joven, Audrey Elizabeth Hale, de 28 años, en una escuela cristiana privada de Nashville, Tennessee, donde fallecieron tres niños e igual número de adultos.
Estados Unidos tiene el triste récord de contar con más armas de fuego en poder de civiles que cantidad de habitantes.
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