Dicha entidad pronosticó que continuará muy alta la concentración de partículas de polvo y arena en suspensión en Beijing y otras 17 demarcaciones del país, con el consecuente deterioro de la calidad del aire.
También advirtió de vientos fuertes y de bajas temperaturas.
Desde anoche sobre esta capital persiste una niebla tan espesa y tóxica, que redujo a escasos metros la visibilidad en las calles y envolvió a los edificios más elevados.
La contaminación sigue en la categoría de “insalubre” y se recomienda cuidado extremo al salir a exteriores, pues el nivel de las partículas PM10 ronda los 400 microgramos por metro cúbico aunque descendió a 246 el índice que mide el deterioro de la calidad del aire.
Según las previsiones, el impacto será peor en Mongolia Interior por su cercanía al desierto del Gobi y el viernes llegará otra tormenta de arena.
China registra un incremento de esos fenómenos en la actual temporada y se espera que habrá varias más por la combinación de altas temperaturas, pocas lluvias y falta de la habitual cobertura de nieve en Mongolia Interior.
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