Con Fina la lírica se realza en todo su esplendor, ya que supo apreciar y engrandecer la poesía en su momento ensayístico, crítico y, además, investigativo.
Publicó su primer libro de poemas a principios de los años cuarenta y perteneció, junto a su esposo Cintio Vitier, al grupo de la revista Orígenes (1944-1956), creada por José Lezama Lima.
Cabe destacar que en su faceta de ensayista, colaboró activamente con su inseparable compañero, con quien publicó algunos volúmenes tan necesarios para el estudio de las Letras hispanoamericanas.
A esta pléyade de la familia de escritores perteneció también el poeta Eliseo Diego -casado con la hermana de Fina- y a cuya persona Gabriel García Márquez se refirió como «uno de los más grandes dentro de la lengua castellana».
La escritora e investigadora literaria cubana nació en esta capital y desde muy temprano sintió inclinación por el universo martiano, por lo que en 1962 comenzó su labor de ferviente estudiosa del Maestro en la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí y luego, en el Centro de Estudios Martianos, donde integró la membresía del equipo de edición crítica de las Obras completas del apóstol.
Recibió los premios Nacional de Literatura 1990, Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda 2007 y el Reina Sofía de Poesía Iberoamericana 2011.
Su creación se tradujo a varios idiomas y formó parte de numerosas antologías.
Otros galardones fueron, entre otros, varios de Crítica Literaria (1987, 1991 y 1992), esta última ocasión recibió el lauro por Los Rembrandt de l’Hermitage; el Premio Nacional de Literatura (1990), el Premio Nacional de Investigación Cultural (2005).
De igual forma, fue merecedora del Premio Internacional de Poesía Federico García Lorca.
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