El más reciente informe de la Secretaría de Gestión de Riesgos indica que debajo de las toneladas de tierra todavía quedan los cuerpos de al menos 38 personas.
Militares y bomberos trabajan en la denominada zona cero para encontrarlas, pese al peligro de nuevos deslizamientos.
El alud, ocurrido en la noche del domingo 26 de marzo en el cantón Alausí de la provincia andina de Chimborazo, sepultó 57 viviendas y otros espacios públicos, como un estadio de fútbol.
Como consecuencia de la tragedia, más de mil personas resultaron damnificadas y hubo que evacuar cinco barrios de la región para evitar otras desgracias.
El pasado 10 de abril, las autoridades cambiaron el nivel de alerta, de amarilla a naranja, por los movimientos en masa en el área de 214 hectáreas que comprende los barrios alauseños de La Esperanza, Control Norte, Nuevo Alausí, Pircapamba y Bua.
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