Quince millones de personas están convocadas a las urnas para escoger a los 50 integrantes de ese órgano, para el que se postularon más de 350 candidatos de alianzas y partidos políticos de distintas tendencias.
Por los escaños compiten la coalición de izquierda Unidad para Chile, la de centro Todo por Chile y la derecha tradicional agrupada en Chile Seguro, además del conservador Partido de la Gente y el ultraderechista Partido Republicano.
La composición del Consejo Constitucional será clave para determinar si se impulsan los cambios que el país necesita o se reproduce una carta magna similar a la impuesta en 1980 en tiempos de la dictadura de Augusto Pinochet.
El órgano tendrá un carácter paritario y hasta ahora las encuestas vaticinan una tendencia inclinada a la derecha y con casi nula presencia de los pueblos indígenas, debido a la postulación de solo dos candidatos de las comunidades originarias.
Aunque el voto es obligatorio y por ello se prevé una elevada asistencia, hay poco entusiasmo de la ciudadanía en estos comicios, a diferencia del proceso iniciado después del estallido social de 2019.
En un sondeo realizado por la firma Pulso Ciudadano, el 76 por ciento de los empadronados dijeron que acudirían a votar, aunque apenas 26,3 de cada 100 consultados manifestaron estar interesados o muy interesados en las elecciones.
El Consejo Constitucional, que se elegirá este domingo, quedará instalado el 7 de junio y tendrá la responsabilidad de redactar y aprobar la propuesta de carta magna que será sometida a referendo el 17 de diciembre.
De ser aprobada, sepultará a la ley fundamental impuesta por la dictadura pinochetista y que ha sido responsabilizada con las desigualdades sociales derivadas del modelo neoliberal.
mem/car