“Hermanas y hermanos bolivianos, hemos llegado a la mitad del camino que, por voluntad de la mayoría del pueblo, iniciamos con mucha esperanza”, escribió el jefe de Estado en su cuenta de Twitter.
Recordó el mandatario que también se trabajó “con firmeza para recuperar la salud, la educación y reconstruir una economía que agonizaba. ¡Lo estamos haciendo!”.
Indicó que su Administración recibe críticas, pero está fortalecida y continuará avanzando.
Arce sostuvo que el Órgano Ejecutivo se siente más fuerte que nunca y no retrocederá ni un paso lo avanzado.
Las autoridades gubernamentales bolivianas impulsan la política de industrialización con sustitución de importaciones con el objetivo de fortalecer la producción nacional con valor agregado y reducir los gastos en mercaderías que se adquieren en el exterior.
En otro mensaje, Arce subrayó que esta política es una manera efectiva “de salvar la patria” con crecimiento y justicia social.
Reiteró que su Gobierno es del pueblo, de la industrialización y que genera oportunidades para todos.
Tras el restablecimiento de la democracia luego del triunfo electoral del binomio Arce-David Choquehuanca como candidatos del Movimiento al Socialismo con el 55,11 por ciento de los votos, Bolivia retomó el Modelo Económico Social Comunitario Productivo.
El resultado se vio al cierre de 2021, cuando el país registró un crecimiento del producto interno bruto de 6,1 puntos porcentuales, además de revertir la paralización de las obras de inversión pública, con el Estado como motor fundamental de la economía.
Según las estadísticas oficiales, en esos 12 meses la erogación por proyectos de inversión pública ascendió a dos mil 600 millones de dólares, equivalentes a un incremento del 48 por ciento en relación a lo ejecutado en 2020.
Como resultado, la pobreza moderada decreció de un 39 por ciento a 36,3 unidades sobre 100, y la extrema de 13,7 puntos porcentuales a 11,1 por ciento.
De esa forma, el Estado Plurinacional se convirtió en el país sudamericano que más redujo ese indicador en 2021.
En el terreno de la salud, Bolivia logró controlar la pandemia de Covid-19 con la gestión y adquisición de 23 millones 815 mil 500 dosis de vacunas, lo cual permitió reducir la tasa de letalidad a un actual 0,1 por ciento.
Tales progresos crearon las condiciones para reiniciar las clases presenciales en todas las escuelas del país.
Bolivia registró en 2022 la inflación más baja de la región (3,1 por ciento), y logró un superávit comercial de 603 millones de dólares, según el Instituto Nacional de Estadísticas.
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