Los bebés; nombrados Fatouma, Kadidia, Hawa, Adama, Oumou, Bah, Mohammed, Oumar y Elhadji, nacieron en un hospital de Marruecos a donde fue trasladada su progenitora para dar a luz quien se suponía embarazada de siete criaturas, pero, por si fueran pocas, sorprendió con otras dos por aquello de “lo que abunda no daña”.
El sábado pasado sus padres dieron una fiesta a la que fueron invitados familiares, amigos en incluso los pediatras encargados de la atención prenatal de la madre, llamada Halima Hailma Cisse, de 27 años.
Bendecida ya con una hija de cuatro años, durante la celebración la familia encabezada por el padre, Abdel Kader Arby, tuvo dificultades para juntar a los nueve bebés, notorios por su dinamismo, y hacerles una foto.
Aunque el tema se mantiene en reserva es improbable que los padres de los nonillizos tengan intención de aumentar su progenie y, por el contrario, es casi seguro que adopten medidas extremas de precaución haciendo caso omiso de la promesa según la cual todos lo recién nacidos traen un pan bajo el brazo.
jcm/msl