La Administración General de Aduanas indicó que el volumen total del comercio exterior fue de 1,94 billones de dólares durante el mes pasado.
En detalle, las exportaciones experimentaron un alza de 16,8 puntos, pero las importaciones bajaron 0,8.
El acumulado del comercio exterior entre enero y abril arrojó una expansión de 5,8 por ciento.
Aunque esos indicadores mostraron un continuo crecimiento, se mantuvo débil la demanda interna y la inflación golpeó fuerte a los principales destinos de las mercancías chinas, con contracciones en los envíos a Estados Unidos y la Unión Europea.
La nación asiática para este año buscará, por sobre todas las cosas, mantener la estabilidad macroeconómica y social, pero al mismo tiempo continuará los esfuerzos para profundizar la política de reforma y apertura, acelerar el crecimiento sobre la base de la innovación y lograr el desarrollo de alto estándar.
Además, se plantea fortalecer más su mercado doméstico y las alianzas con países y regiones amigas como alternativa para reducir la dependencia de Estados Unidos y sortear los efectos de la crisis global provocada por la pandemia de Covid-19.
lam/ymr