Beijing declaró persona no grata a Jennnifer Lynn Lalonde, la cónsul general de Ottawa en Shanghái (este), en reciprocidad y horas después de que el estado norteamericano hiciera lo mismo con Zhao Wei, su cónsul en Toronto.
En ambos casos, los diplomáticos tienen hasta el fin de semana para abandonar cada nación.
China expresó fuerte rechazo a la decisión canadiense, presentó una protesta y advirtió que se reserva el derecho de proceder con otras medidas.
Además, su embajada en Ottawa afirmó que la expulsión de Zhao se basó en rumores exagerados sobre la supuesta intrusión de China, denunció la violación a las leyes internacionales con ese paso y remarcó del daño a las relaciones bilaterales.
Advirtió a la parte canadiense de prepararse para asumir todas las consecuencias que surjan del incidente y recalcó el respeto a la no injerencia en los asuntos internos de otros.
Desde la semana pasada la ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, Melanie Joly, reveló los planes de expulsar al diplomático chino tras conocerse un reporte de inteligencia sobre su presunto complot para intimidar en Hong Kong a familiares de un legislador.
La polémica podría conducir nuevamente al deterioro de los vínculos Beijing-Ottawa, que sufrieron momentos de mucha discrepancia entre 2018 y 2021 tras el arresto de una ejecutiva de Huawei y de ciudadanos canadienses aquí.
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