Las dos partes mostraron satisfacción por el arreglo que supone una tregua. Se establece el aumento salarial del cuatro por ciento en 2023, y del tres por ciento en 2025 y 2025, así como una cláusula de revisión del uno por ciento en función de la inflación.
En un acto aquí, los líderes de Comisiones Obreras (CCOO) y la Unión General de Trabajadores (UGT), Unai Sordo y Pepe Alvarez, respectivamente, rubricaron los documentos con Antonio Garamendi, presidente de Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y con Gerardo Cuerva, titular de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (CEPYME).
“Lo único importante en este país es que se van a subir salarios, y no las fotos”, dijo la vicepresidenta segunda y ministra del Trabajo, Yolanda Díaz, al minimizar su ausencia en la ceremonia.
Garamendi, en distintos espacios incluido el programa La Hora de la Uno de TVE, subrayó que se trata de un acuerdo beneficioso para todos.
‘Que no monopolice nadie nada (…) esto es bueno para el Gobierno, para la oposición (…) queremos salir de ese debate político’, puntualizó el jefe de la patronal.
El secretario general de CCOO, Unai Sordo, calificó el texto como una gran aportación a la negociación colectiva, al tiempo que expresó su deseo de que marque un punto de inflexión para desbloquear los más de mil 300 convenios colectivos actualmente bloqueados.
Si se logra provoca una recuperación de los salarios, creemos que es el mejor antídoto ante los riesgos y la dificultad económica que todavía amenazan a España, comentó Sordo.
Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, encomió el convenio y su trascendencia para el futuro de España.
A su turno, Pepe Alvarez, por la UGT, señaló que el acuerdo va en una buena dirección y valoró la recuperación de la cláusula de garantía salarial y las subidas pactadas, que va a permitir no solo mantener el poder adquisitivo de los salarios, sino recuperarlo.
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