Al intervenir en la XXVIII Reunión Ordinaria del Consejo de Ministros, la autoridad reconoció que, no obstante, los cambios mundiales obligaron a redefinir prioridades dentro de las áreas focales desde la creación hace casi 29 años.
La más alta prioridad para el desarrollo sostenible ahora -apuntó- tiene que ver con mitigar el impacto relacionado con el cambio climático en todas sus formas.
Insistió en el aumento de intensidad y frecuencia de los fenómenos naturales, que dejan una estela de pérdida de vidas y destrucción, pero a su vez afectan los ecosistemas y la biodiversidad de una de las regiones más ricas del orbe.
El sargazo es la expresión que más impresiona, pues alcanza niveles críticos, una emergencia para la mayoría de los países dependientes del turismo como pilar de sus economías, remarcó Sabonge.
En cuanto a integración financiera de la región, ubicó con la más alta prioridad a la conectividad física y digital. Sobre la primera, mencionó el transporte multimodal y la plataforma logística que implica un mecanismo para facilitar el comercio y la distribución.
Calificó de imprescindible la conectividad aérea y abundó que los desafíos comunes son múltiples, por lo cual -instó- la mejor manera de buscar soluciones es hacerlo juntos.
El secretario general de la AEC destacó el carácter presencial empleado aquí, que desde Managua, Nicaragua, en mayo de 2019, a causa de la pandemia de Covid-19, no se reunían de esta manera.
La Cumbre, bajo el lema «Por un mejor mundo para nuestro Caribe con el firme propósito de la integración», concluirá mañana con una Declaración Final que aprobarán los jefes de Estado y Gobierno o líderes de delegaciones.
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