En declaraciones a Dhaka Tribune, autoridades de Relaciones Exteriores explicaron que solo diplomáticos recibían el trato preferencial desde el lamentable incidente por un problema de seguridad y ni siquiera los funcionarios del país cuentan con esa deferencia.
Agregaron que en las naciones desarrolladas no se otorgan beneficios, por lo que el Gobierno reevaluó la situación por considerarlos innecesarios, dijeron.
Señalaron que la ley y el orden en Bangladesh no permiten situaciones como los asesinatos a tiros en las calles o en los centros comerciales.
Los funcionarios acotaron que el Gobierno valora también retirar la señalización de los carros diplomáticos con las banderas de los países.
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