El cónclave se extenderá hasta mañana con debates de alto nivel, debe arrojar nuevos acuerdos y varias voces coinciden en que será un escenario para promover más las iniciativas globales de China en cuanto a desarrollo, seguridad y civilización.
Según la prensa local, el evento es de gran significado porque permitirá acelerar los nexos e incrementar los beneficios de la cooperación para todas las partes, principalmente en el contexto del proyecto de la Franja y Ruta de la Seda, llamado a convertirse en una megaplataforma de intercambios e infraestructuras.
De hecho, ayer las autoridades de Beijing anunciaron un aumento de los vuelos desde y hacia dichos territorios, así como los preparativos para firmar un memorando de entendimiento sobre el desarrollo de una “ruta aérea de la seda” que partirá de Xi´an.
Durante las últimas tres décadas China adoptó asociaciones estratégicas con Kazajastán, Kirguistán, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán, todos reforzaron el principio de la buena vecindad y cooperaron bajo el principio de ganancias compartidas, lo cual es considerado un paradigma en el nuevo modelo de relaciones internacionales.
Datos del Ministerio de Comercio cifraron en más 70 mil millones de dólares el valor de los intercambios mercantiles entre las partes durante 2022, con destaque en las importaciones chinas de productos agrícolas, minerales y combustibles, y en las exportaciones de maquinaria electromecánica.
Además, las inversiones del gigante asiático en sus cinco vecinos alcanzaron los 15 mil millones de dólares y tuvieron como destino proyectos de exploración de gas, manufactura, conectividad y tecnología digital.
jha/ymr