En su página web, el organismo planetario indica que este será el regreso a las pistas de la corredora en la temporada de verano, aunque en la carrera parisina, prevista el 9 de junio, lo hará en los 400 metros planos.
La vallista de 23 años se decantó por la vuelta libre de obstáculos en la pista del estadio Charléty al tener seguro su boleto al Campeonato Mundial de Budapest (del 19 al 27 de agosto) para correr su distancia favorita, en la cual estampó un fenomenal crono de 50.68 segundos el año pasado.
Por tanto, decidió aprovechar la oportunidad de probar su velocidad máxima en liso este verano, donde seguramente bajará de los 50.07 segundos que exhibe como mejor marca personal, y se remonta a 2018 cuando tenía 19 años.
Hace unos días su entrenador, Bob Kersee, dijo al diario estadounidense The Orange County Register que su pupila es considerada la primera amenaza real para el récord mundial de la alemana Marita Koch (47.60), vigente hace 38 años.
En cualquier caso, será un verdadero regalo para el público que asista al evento, pues McLaughlin-Levrone solo disputó cuatro carreras en el circuito mundial desde el inicio de su carrera, todas ellas en 2018.
El año pasado, además de los Trials y el Mundial donde brilló enormemente en Oregón, su temporada fue de solo tres encuentros.
La también campeona olímpica de los 400 metros vallas tendrá como principal rival a la dominicana Marileidy Paulino, subtitular estival en Tokio 2020 y vigente campeona del mundo en la vuelta al óvalo, quien tiene un registro de 48.99.
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