Durante seis meses unas 60 obras maestras italianas de los siglos XV al XVII, del Museo Nacional de Capodimonte, se exhibirán en la capital francesa, incluidos lienzos de Caravaggio, Tiziano, Anibal Carracci, Guido Reni, Ribera y Mattia Preti, estos dos últimos pintores de la escuela napolitana, nunca expuestos en Francia.
También para el 7 de junio, último día de su estancia en ese país, está programada la presencia de Mattarella en el Instituto Estatal Italiano «Leonardo Da Vinci», así como un almuerzo en el Palacio del Elíseo con el presidente francés y su esposa.
De acuerdo con observadores, ambos mandatarios abordarán temas bilaterales, internacionales y particularmente regionales de actualidad, como el medio ambiente, la energía, inmigración y el apoyo a Ucrania en el conflicto bélico entre ese país y Rusia, así como las medidas contra Moscú.
El 26 de mayo último se reunieron en Roma el ministro de Asuntos Exteriores de Italia, Antonio Tajani, y su homóloga francesa, Catherine Colonna, quienes acordaron avanzar hacia una mayor colaboración entre ambos países, en un ambiente de cordialidad, tras recientes incidentes que afectaron los vínculos entre ambos gobiernos.
Un reciente diferendo se desató tras acusaciones del titular del Interior galo, Gérald Darmanin, contra la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, a la cual culpó por ser “incapaz de resolver los problemas migratorios” en el Mediterráneo central, lo cual se traduce en la entrada ilegal a suelo francés de miles de personas.
El incidente quedó atrás, aparentemente, luego de las conversaciones sostenidas el pasado 20 de mayo entre Meloni y el presidente Emmanuel Macron, en el marco de la cumbre del G7 en Hiroshima, Japón.
En su última conversación con Colonna, Tajani dejó en claro que “a veces podemos haber tenido posiciones diferentes”, pero a pesar de ello “es importante tener un diálogo constructivo” para “una indispensable acción conjunta frente a los principales desafíos internacionales, comenzando por la migración”
El canciller italiano señaló que este diálogo “debe tener lugar a través de los canales apropiados, como los previstos por el Tratado del Quirinale”, que entró en vigor en febrero de este año, el cual refuerza la colaboración bilateral económica, cultura, de defensa, en política exterior y migratoria entre ambas naciones.
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