“Se trata de un fuerte voto de confianza en la Unesco y en el multilateralismo. Confianza no sólo en la centralidad del mandato de la organización –cultura, educación, ciencia e información–, sino también en la manera en que este se traduce hoy en día”, subrayó la alta funcionaria en el encuentro.
De acuerdo con el ente multilateral, el pedido de Washington es reincorporarse a partir del mes próximo, sobre la base de un plan de financiación completo, relacionado con los impagos acumulados.
En una carta dirigida a la Directora General, el Departamento de Estado elogió la manera en la que la Unesco ha afrontado los nuevos retos en los últimos años, modernizando su gestión y reduciendo las tensiones políticas, abundó. El Congreso del país norteño aprobó en diciembre un proyecto de ley con la asignación de más de 500 millones de dólares para pagar la deuda y allanar el camino del regreso a la organización.
Bajo la administración de Donald Trump y esgrimiendo una alegada postura antiisraelí, Estados unidos se retiró de la Unesco el 12 de octubre de 2017, aunque ya había suspendido su contribución en 2011.
El plan considerado para materializar la reincorporación debe someterse a la aprobación de la Conferencia General de los miembros del ente, con algunos de ellos que han pedido la celebración a corto plazo de una sesión extraordinaria de ese órgano de gobernanza.
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