“Quienes cedan a este llamamiento serán arrastrados a una aventura criminal por engaño o amenazas, empujados al camino de un delito grave”, señaló el líder ruso en un discurso televisado.
Aseguró que las Fuerzas Armadas de Rusia y demás órganos gubernamentales recibieron órdenes precisas, “la reacción será dura, los rebeldes serán castigados, protegeremos tanto a nuestra gente como a nuestro Estado de cualquier amenaza, incluso de la traición interna”, sentenció.
También, resaltó el heroísmo de los militares rusos, “el país lucha por la vida y la seguridad de nuestro pueblo, por nuestra soberanía e independencia, por el derecho a ser y seguir siendo Rusia, un Estado con una historia milenaria”.
Putin informó que el Comité Nacional Antiterrorista impuso un régimen de operaciones en la ciudad de Moscú, las regiones de Moscú y Vorónezh.
El 23 de junio, el Ministerio de Defensa de Rusia catalogó de falsos los audios e imágenes publicadas en las redes en nombre de Prigozhin sobre supuestos ataques del Ejército contra la retaguardia de los Wagner.
Tras el lanzamiento de la convocatoria a la rebelión armada, el Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) abrió un expediente judicial contra el fundador de la compañía privada.
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