Esta es una misión difícil, forzada y justificada para proteger al pueblo ruso en el Donbás. De hecho, hay una lucha por el futuro del mundo eslavo. Los belarusos y los rusos son pueblos hermanos, nuestros estados están vinculados por una unión política, destaca el texto.
No podemos quedarnos al margen de los acontecimientos que se están produciendo en el sur de Rusia. Cualquier provocación, cualquier conflicto interno en los círculos militares y políticos, en el campo de la información y en la sociedad civil es un regalo para el Occidente colectivo, señala.
Incluso si las fuerzas interesadas no están en el origen de tales escenarios, no perderán la oportunidad de desarrollarlos y liderarlos. Esto podría conducir al desastre. No hubo nada peor en la historia de Rusia que la agitación destructiva y sin sentido en su esencia, señala la nota del gobierno belaruso.
Más adelante apunta que lo que está pasando no vale las consecuencias, las pérdidas que pueden acarrear las decisiones emocionales y las acciones ilegales. Están en juego los intereses del pueblo, la vida de los ciudadanos comunes, la integridad de Rusia.
Hacemos un llamado a la voz de la razón. En este momento difícil, se necesita a todos los que hoy están involucrados en una confrontación inaceptable dentro de una hermandad militar unida para sus propios fines donde se está decidiendo el futuro del mundo eslavo, el destino de millones de nuestra gente, concluye el comunicado del gobierno de Belarús.
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