Los eventos del fin de semana son un asunto interno de Rusia, afirmó Stoltenberg citado por la televisión local después de las conversaciones con el presidente lituano, Gitanas Nausėda.
Además, Stoltenberg volvió a señalar la importancia de que los países de la OTAN brinden asistencia a Ucrania.
Durante el 23 de junio, el jefe de la empresa militar privada Wagner, Yevgeny Prigozhin, anunció que el ejército ruso supuestamente había lanzado un ataque contra las posiciones del grupo.
El ministerio de Defensa de la Federación de Rusia negó estas declaraciones.
Más tarde, la Fiscalía General informó que el Servicio de Seguridad ruso abrió un caso contra Prigozhin en virtud del artículo 279 del Código Penal de la Federación de Rusia por el hecho de organizar una rebelión armada.
El sábado 24 de junio, el presidente de Belarús, Alexander Lukashenko, y Prigozhin sostuvieron conversaciones telefónicas, como resultado de lo cual el líder de la empresa militar aceptó una propuesta para detener el movimiento de combatientes.
Luego de eso, el jefe de Wagner anunció que las columnas del grupo regresarían a los campamentos.
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