Él va a venir por tratarse de una fecha tan simbólica, dijo Van Klaveren, y recordó que México fue un país extraordinariamente solidario en esa época.
Muchos chilenos recibieron asilo allí después del golpe encabezado por Augusto Pinochet contra el gobierno de la Unidad Popular del presidente Salvador Allende y durante los 17 años de dictadura.
En una entrevista a Tele13 Radio, el ministro de relaciones exteriores se refirió también al reciente acuerdo con México para trasladar la presidencia pro tempore de la Alianza del Pacífico a Chile como paso transitorio al mando de Perú.
“Es una excelente noticia porque había un impasse grande y gran parte de las actividades dentro de la Alianza estaban paralizadas”, dijo.
El trabajo de ese mecanismo quedó suspendido desde que López Obrador rechazó pasar el cargo al gobierno de Dina Boluarte en Perú, al que calificó de ilegítimo, y que está responsabilizado por graves violaciones de los derechos humanos.
“Llegamos a la solución de que México traspasara la presidencia a Chile y luego nosotros a Perú. Fueron conversaciones muy amistosas», sostuvo Van Klaveren.
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