Muchos de los participantes en la “marcha blanca” portaban pulóveres con la inscripción “justicia por Nahel”, en una movilización que según las autoridades reunió a más de seis mil franceses.
La madre del adolescente de 17 años, Mounia, encabezó la denuncia, en medio de un clima de mucha tensión, marcado por protestas y episodios de violencia desde el martes, cuando ocurrió la tragedia durante un control policial.
Incendios y enfrentamientos con uniformados han generado una situación compleja, que llevó a la presidenta de la Región Parisina, Valérie Pécresse, a suspender esta noche en París y los otros departamentos la circulación de buses y tranvías, a partir de las 21:00, hora local.
La Fiscalía de Nanterre estableció el procesamiento y la prisión preventiva para el policía que disparó mortalmente contra Nahel, al considerar que no estaban dadas las condiciones para el uso de su arma de fuego.
El agente esgrimió legítima defensa ante la alegada negativa del menor de edad de detener su vehículo, versión que no encaja con las imágenes difundidas en un video con gran cantidad de visualizaciones en las redes sociales.
Frente al tenso panorama imperante, el presidente Emmanuel Macron llamó a la calma y a dejar que “la justicia guíe las próximas horas”.
En su cuenta en Twitter, el jefe de Estado rechazó la violencia contra comisarías, escuelas y alcaldías.
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