De acuerdo con esa cartera, el gobierno gestionará un financiamiento preventivo para mitigar los impactos del evento natural.
Arosemena pedirá el préstamo al presidente del BID, Ilan Goldfajn, en una reunión que mantendrán ambas autoridades durante el foro del organismo financiero.
De concretarse el adelanto, se sumaría a otros compromisos que el Gobierno adquirió con ese y otras instituciones financieras internacionales, como el FMI.
Tras el sismo de magnitud 6,5 que afectó las provincias de Guayas y El Oro el pasado 18 de marzo, el BID otorgó a Ecuador un Préstamo Contingente para Emergencia por Desastres Naturales, por 60 millones de dólares.
Expertos de esta nación andina prevén que El Niño afecte el territorio nacional en el último trimestre de 2023, con más de un 80 por ciento de probabilidades de tener una intensidad entre moderada a baja y un 56 por ciento de probabilidades de que sea de moderada a alta.
De ocurrir el peor escenario previsto, los costos para Ecuador podrían ascender a cuatro mil millones de dólares.
La Secretaría de Gestión de Riesgos estima que 2,3 millones de personas de 17 provincias serán afectadas por las condiciones meteorológicas extremas, principalmente por inundaciones o deslaves en El Oro, Guayas, Los Ríos, Manabí y Esmeraldas.
Este viernes, el ministro Arosemena también participa en la reunión de Gobernadores Amazónicos del BID, para impulsar planes de desarrollo sostenible en esa área a través del Programa Regional Amazónico.
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