La misma está incrustada en la nucleocápside del virus, una estructura formada por proteínas y ácidos nucleicos contenidos en una membrana vírica, precisa la revista mSphere.
El equipo científico utilizó un protocolo ELISA de bloqueo basado en la proteína N para su prueba. “Este método consiste en recubrir una placa ELISA con la proteína N, y a continuación, añadir una muestra de suero del animal analizado”.
Afirman los expertos que la proteína N es una diana mejor que las proteínas víricas unidas a la membrana que suelen utilizarse en las pruebas de anticuerpos.
«La proteína N es más abundante y está más conservada que las proteínas utilizadas en la mayoría de las pruebas», argumentaron los científicos de la Universidad de Illinois Urbana-Champaign, Estados Unidos.
Esto significa que la estructura de la proteína es más consistente en todas las especies, lo que la convierte en una buena diana para las pruebas de anticuerpos.
El virus que causa la Covid-19 en el ser humano también infecta a diversos animales, y hasta ahora fue detectado en roedores, simios, perros, gatos, ciervos y diversos animales de granja y zoológico.
Este también muta en estos huéspedes, lo que puede dar lugar a nuevas variantes que pongan en peligro su salud y la de las personas.
El desarrollo de pruebas precisas de coronavirus entre especies proporciona una herramienta para la vigilancia del SARS-CoV-2 en poblaciones animales, ayudando a identificar nuevos reservorios para prevenir futuros brotes de la enfermedad.
mem/joe
