El coloso, ubicado en la provincia de Morona Santiago, generó un promedio de 21 explosiones cada hora durante este fin de semana, lo cual provocó el represamiento del río, según informó el Instituto Geofísico (IG).
La institución científica advirtió además que en caso de ocurrir lluvias fuertes el agua podría remover el material acumulado y causar flujos de lodo y escombros.
Ese material descendería por los flancos del volcán y desembocaría en los ríos adyacentes, como el Upano, para poner en riesgo a la infraestructura, detallaron los especialistas del IG.
El puente brinda servicio a seis mil vehículos por día y conecta a productores agrícolas, ganaderos, comerciantes y turistas de la región Amazónica ecuatoriana.
Mientras tanto, los expertos mantienen la vigilancia sobre el volcán Sangay, uno de los más activos de Ecuador, que desde 2018 se encuentra en proceso eruptivo con ruido y emisión de ceniza que se desplaza hacia las provincias de la costa ecuatoriana, principalmente Guayas y Los Ríos.
jf/nta