Por supuesto que en ese caso tal acción tendrá un impacto en la prolongación del conflicto, precisó el ministro, quien además recordó en el sitio oficial del ente de Defensa que Rusia tiene en servicio «municiones de racimo para todas las ocasiones».
”Al mismo tiempo, son mucho más eficaces que las estadounidenses, su gama es más amplia y diversa», aseguró.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció el pasado 7 de julio los planes de empezar a suministrar a Ucrania municiones de racimo.
Según comentó la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, esos suministros ponen en peligro la vida de los civiles y buscan alargar la crisis.
De acuerdo con fuentes estadounidenses, Ucrania recibirá munición de racimo М864 de 155 milímetros para artillería, particularmente para los cañones autopropulsados М109 Paladin y obuses remolcados M777.
Las municiones de racimo producen una gran área de impacto porque explotan en el aire dispersando submuniciones. Un proyectil М864 va cargado de 72 submuniciones: 48 M42 y 24 M46. Las primeras se usan contra la infantería y las otras, contra los blindados.
Los militares norteamericanos afirman que entre el 5 y el 14 por ciento de las municiones de racimo no explotan por estar almacenadas durante años. En este caso se comportarán como minas que amenazan a la población civil incluso después de terminado el conflicto.
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