Según el titular, durante ese tiempo las tropas rusas destruyeron 21 aviones, cinco helicópteros, mil 244 tanques y otros vehículos blindados de combate enemigos, 17 tanques Leopard de fabricación alemana, cinco tanques franceses de ruedas AMX, y 12 vehículos de infantería Bradley estadounidenses.
Además, eliminaron 914 unidades de equipos especiales de automoción, dos sistemas de misiles antiaéreos, 25 lanzacohetes múltiples, 403 piezas de artillería de campaña y morteros, y derribaron 176 proyectiles HIMARS, 27 misiles Storm Shadow y 483 drones ucranianos, destacó Shoigú.
El ministro destacó los daños que las tropas rusas infligieron a la artillería enemiga. «Repito una vez más: 403 cañones, incluidos 43 sistemas de artillería M777 estadounidenses y 46 sistemas de artillería autopropulsada donados por Polonia, Estados Unidos y Francia».
Igualmente añadió que las tropas rusas siguen atacando con armas de precisión las reservas enemigas y los equipos militares procedentes de Occidente, reduciendo significativamente el potencial ofensivo de las tropas ucranianas.
Shoigú también señaló que el Ministerio de Defensa ruso es consciente de que los resultados de la labor de combate son cuidadosamente seguidos y analizados por las agencias de inteligencia extranjeras, principalmente Estados Unidos y los países de la Organización del Tratado del Atlántico Norte.
«Toman nota de la alta eficacia de nuestras líneas de defensa, de las barreras antiminas instaladas, del trabajo de alta calidad del ejército y de la aviación de ataque en la realización de ataques preventivos contra objetivos enemigos identificados”, precisó.
“Destacan especialmente la gran fortaleza de nuestros militares y la pronta respuesta de los mandos a los cambios de la situación», concluyó el titular.
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