La medida es una estrategia anunciada por el Gobierno ecuatoriano el pasado mes de junio para evitar la especulación y la escasez del producto pues el país carece de una reserva estratégica de arroz, maíz y soya para enfrentar los efectos del fenómeno El Niño.
De acuerdo con el ministro de Agricultura y Ganadería, Eduardo Izaguirre, la nación sudamericana importará 30 mil toneladas del grano, como medida para garantizar la soberanía alimentaria en el marco de un Plan de Prevención y Preparación para mitigar los daños del evento meteorológico.
El precio del cereal aquí tuvo incrementos en las últimas semanas y los agricultores apuntan a una posible escasez por los impactos de las lluvias en los arrozales; sin embargo, el Gobierno lo atribuye a procesos de acaparamiento y especulación.
mem/nta