Así que continuará en la incógnita cómo entró el polvo a la mansión oficial, porque la agencia notificó este jueves que la investigación concluyó por «falta de pruebas físicas».
Según explicó, el envoltorio de la droga fue sometido a exámenes de huellas dactilares y de ADN y en la revisión hubo «un índice de varios cientos de individuos que pudieron acceder a la zona donde se encontró la sustancia».
A la salida de una reunión informativa a puerta cerrada en el centro de información confidencial del Capitolio, los legisladores del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes dijeron que la investigación terminará oficialmente mañana.
La droga fue detectada en un vestíbulo del Ala Oeste, junto a la entrada por la avenida West Executive, en una zona en la que se depositan aparatos electrónicos y objetos personales antes de entrar, informó el Servicio Secreto al diario The Hill.
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