El jefe de estado ruso, en una intervención este domingo en el Perviy Kanal, refirió que la propia administración norteamericana había evaluado, anteriormente, el uso de ese tipo de proyectiles como un crimen de guerra.
Putin recordó que Rusia tiene suficientes reservas de municiones de racimo de distinto tipo, y hasta el momento no las ha utilizado, pese a que en un momento determinado el ejército ruso sufrió escasez de municiones, sin embargo, como medida simétrica Moscú se abroga el derecho de usarlas. Finalmente, el mandatario comentó que Estados Unidos suministra municiones de racimo a Ucrania, no porque todo les vaya bien en la llamada contraofensiva, sino debido a la escasez general de proyectiles.
Recordó que «el Ejército ucraniano gasta en un día de combates entre cinco mil a seis mil municiones de calibre de 155 milímetros, mientras que Estados Unidos fabrica unas 15 mil al mes. Ya no alcanzan, ni en Europa alcanzan las municiones», agregó.
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